Identificación de Metas a Corto y Largo Plazo durante la Crianza

Acompañar y educar a un niño desde el nacimiento hasta la edad adulta es un camino lleno de aprendizaje y hermosas experiencias. Aún así, muchas familias comienzan este viaje sin pensar en hacia donde quieren ir. Por esta razón, hoy quiero compartir con ustedes cómo identificar metas de crianza y por qué es importante considerarlas e implementarlas.

Metas a Corto Plazo

Imaginemos la siguiente situación: es una mañana típica en su casa, su hijo o hija se está preparando para la escuela y se está haciendo tarde. ¿Qué quieres que el o ella haga? ¿Cuáles son tus objetivos esa mañana? Escribe en tu celular o en una hoja de papel cinco cosas que espera que su hijo/hija haga antes de la escuela esa mañana.

¿Listo? Ahora veamos qué tipo de metas enumeraste. ¿Haz incluido deberes como: vestirse rápidamente, comer todo el desayuno, escuchar tus órdenes? Esos son objetivos o metas a corto plazo. Los objetivos a corto plazo son aquellas tareas que los padres quieren que sus hijos o hijas realicen de inmediato, que son funcionales en un momento específico y que son necesarias para la convivencia diaria.

Metas a Largo Plazo

Ahora hagamos un segundo ejercicio.

Imagine que su hijo o hija está a punto de cumplir 21 años. Cierra los ojos e imagina cómo se habrá transformado en un adulto. ¿Qué tipo de persona te gustaría que fuera? ¿Qué tipo de relación esperas tener con él o ella? Haga una lista de cinco características que le gustaría que su hijo/hija tenga cuando cumpla 21 años.

¿Escribiste cosas como: estar cerca de la familia, cuidarte cuando seas una persona mayor, tener una buena pareja, ser independiente, ser honesto, ser amable con las personas, ser responsable en su carrera?

Esas son metas a largo plazo, son lo que los padres y madres generalmente quieren de sus hijos/hijas cuando crezcan. Los objetivos a largo plazo requieren mucho tiempo para conseguirlos, e incluyen esos deseos que tenemos para nuestros hijos e hijas: ser responsables, proactivos, buenos padres y madres, empáticos, sensibles, que puedan resolver conflictos de manera efectiva, que tengan buenas habilidades de comunicación, entre otros.

Pensar a corto y largo plazo al mismo tiempo

Ahora, aquí viene el truco. Es bastante fácil identificar las metas a corto y largo plazo que queremos para nuestros hijos e hijas, sin embargo, el lado problemático es conciliar las metas a corto plazo con las metas a largo plazo.

Regresemos al primer ejercicio, donde su hijo/hija se está preparando para la escuela, se levantó tarde, necesita desayunar, cepillarse los dientes y salir a tiempo. Todo lo que usted quiere en ese momento es que él/ella se prepare, y él/ella está haciendo todo en cámara lenta. Sí, estás empezando a ponerte tenso y frustrado y listo para gritarle.

Tal vez un tono más fuerte hacia su hijo/hija lo hará moverse más rápido, y usted logre su objetivo a corto plazo, pero ¿qué sucedió con sus objetivos a largo plazo? Cuando le gritas a un niño o niña, ¿estás pensando en las metas de que él / ella sea un adulto con excelentes habilidades de comunicación o que sea amigable con las personas?

La forma en que actuamos en situaciones cotidianas es un modelo para los niños y niñas. Mediante la imitación de sus padres, los niños y niñas aprenden a socializar, controlar el estrés, resolver conflictos y expresar sus emociones. Si gritamos cuando estamos enojados o estresados, debemos esperar entonces que ellos y ellas hagan lo mismo. Los padres a menudo reaccionan a las frustraciones a corto plazo bloqueando los objetivos a largo plazo.

¿Cómo podemos lograr los objetivos a corto y largo plazo?

Mirando los desafíos a corto plazo como una oportunidad para trabajar en las metas a largo plazo. Cuando se sienta estresado o enojado porque su hijo/hija no está haciendo lo que le pidió, usted tiene la oportunidad de enseñar algo más importante: cómo expresar emociones hablando, no gritando.

 En las pequeñas acciones todos los días puedes:

  • Encontrar soluciones a largo plazo que desarrollen la autodisciplina de los niños y niñas.
  • Comunicar claramente sus expectativas, reglas y límites a sus hijos/hijas.
  • Construir una relación de respeto mutuo con ellos y ellas.
  • Enseñarles habilidades que serán útiles para toda la vida.
  • Aumentar la capacidad y la autoconfianza de su hijo para manejar los desafíos.
  • Enseñarles cortesía, no violencia, empatía, amor propio, derechos humanos y respeto por los demás.

Como mencioné al principio, la crianza de los hijos e hijas es un proceso de aprendizaje, que a veces puede ser un desafío, pero a largo plazo será extremadamente satisfactorio.

Stay healthy, stay safe!

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